Y las diría una y otra vez. Y las repetiría.
Porque cuando se trata de sentimientos, las palabras nunca son suficientes por mucho que tengan como pretensión acaparar todo ese universo infinito que llevas dentro.
Siempre dejan ese hueco incondicional para los hechos.
Nacemos para vivir, por eso el capital más importante que tenemos es el tiempo. Es tan corto nuestro paso por este planeta que es una pésima idea no aprovechar cada instante, con el favor de una mente que no tiene limites y un corazón que puede amar mucho más de lo que suponemos.
Datos personales

- Silvia
- Tal vez me ha incitado a hacerme este blog el hecho de que me cuesta decir lo que pienso, entre otras cosas. Puedo describirme a mí misma con bastante seguridad. Soy pesimista conmigo misma, bastante insegura; aunque cuando estoy segura de algo lucho por mantener bien alta mi opinión. Lo cual deriva a que sea muy cabezota, cosa que muchas veces me juega malas pasadas, pues no suelo guiarme mucho por los consejos de los demás y no me doy cuenta de que tengo que escuchar más allá de mí hasta que me estampo contra algún mal producto de ésta mi cabezonería. Creo que me sacaré el título de ayudante personal, ya que me encanta dar consejos y ayudar a los demás. Demasiado sentimental diría yo... Cosa que tampoco me lleva por muy buen camino, porque ésto me hace ser a la vez ilusa y muchas veces me llevo decepciones. Sí, sueño demasiado. Amante de la música ante todo. Sin música no habría luz ni color. Pienso que ésta es una gran vía que nos lleva y nos ayuda a expresar nuestros más profundos sentimientos. Enamorada de las miradas. Pues creo que ésta es la parte del cuerpo que lo dice todo de una persona. Amo los animales.